NO INTENTEN JUSTIFICAR. RECONOZCAN LA VERDAD

Cuando les fastidien los camelos de las llamadas huelgas generales, entonces no estarán tan contentos, y dirán que crispan. Atribuirme a mí la “abadía” resulta incongruente, porque hay que ser petardo, para no darse cuenta de que alguien ha hecho lo que hay hecho.

Lo mismo me da un sol, que un planeta, que un edificio. Alguien lo hace. Si no se entiende, o no se quiere entender es problema del obtuso, y no de la realidad. Solo a criticar ¡como no! al cura pederasta (parece ser que solo los curas son pedófilos) y ya tenemos un gran argumento. ¡Pues vaya!

Acordémonos de Robespierre, Dantón, los jacobinos and Company, cuyos hechos trajeron a Napoleón, y muchos más muertos en batallas para hacer… un imperio. O echando mano a la Inquisición, de la cual ya sabemos más que de lo que pasa en nuestras familias, lo cual ya está pasado hace siglos, y no vamos a redundar más en la cuestión porque nos convenga.

De vez en cuando en cuando, oigo gritos y becerradas, me asomo y pregunto ¿eso que es? y me dicen: ¡es una huelga! ¡Ah, no lo sabía! ¿Y para qué, si ellos están de acuerdo con la entidad contra la que se supone que protestan? Por lo menos en las procesiones hay silencio y paz.

Esas patochadas me ponen azul, ¡je je!  Porque rojo ya no puedo con la forma de producirse, los llamados rojos con las cuentas, las mamandurrias, y la agresividad, siempre amenazando con la paz social.  A mí me da igual, aunque simpatizo con la izquierda, porque se apropia de las ideas del Jesús el Cristo (con mayúscula que es nombre propio), porque ellas no han inventado nada. Marx es un chamizo viejo, y ya no tiene razón de ser como tampoco Malthus.

Le dan otro nombre y ¡yastá! Somos únicos. Y mientras España desangrándose, cuando hay tipos que no han trabajado ni la milésima que yo, y ganan diez veces más; con lo cual claro, defienden lo indefendible, porque es mucha pasta y gusta vivir como el Sr. Marqués. Utilizando claro está, la parodia de que ellos les van a liberar del marqués… para ponerse ellos. ¡Y a bien, que no saben hacerlo!

¡Y no les critico porque a todos les gusta vivir bien y ¡viva el lujo y quien lo trujo! Otra cosa es el argumento genuinamente evangélico, pero en esto,  todos se van contra el Papa y al malvado cura.  Así, tienen a quien criticar y exonerarse de responsabilidades. A los causantes de este desastre “bandeja y puente de plata”.

El malo es Aznar, con la guerra y el tren, (¡cualquiera sabe lo de tren!). Porque ahora no estamos en guerra, no; cuando mueren nuestros chicos, en lugares donde no se nos ha perdido nada, nada. Ahora, guerra sí. Y eso es lo que critican  esos medios tan vituperados, porque dicen la verdad.

Y están en su derecho. El que no comprende la democracia, mejor se calla. Solo ser honestos, y ser alguien por sí mismo, y no esclavo de lo que diga otro. Tenga su propio criterio, e infórmese para saber.

El ser humano es tan especial, que solo lo que se corresponde con el Evangelio de Jesucristo funciona: y no tenía necesidad de que nadie le diese testimonio del hombre, pues él sabía lo que había en el hombre. Juan 2:25) Derecha o izquierda da igual. El pueblo, es la base de todo lo que haga el político. El Pueblo con mayúscula, debe ser el protagonista, y todo el que aspire a gobernarlo, tiene poco menos que decir: SOY SU LÍDER; TENGO QUE SEGUIRLES.

La derecha es egoísta, pero la izquierda es ambiciosa, y lo peor,  no conoce que al hombre solo se le puede servir, o por las buenas, con los marrones de la democracia, o con el sable militar. Que es donde desemboca invariablemente la izquierda. Solo un hombre comprendió al pueblo y ese fue Jesús. Eso es así y hay millones de testigos a los que los “otros” llaman bobos. Ya se averiguará quien es el bobo.